LA PAZ ES POSIBLE.

Una MENTE ILUMINADA percibe por CONCEPTOS y no se deja llevar por elloos.
Un CORAZÓN ILUMINADO percibe por SENTIMIENTOS, y no se deja llevar por ellos.
Un FÍSICO ILUMINADO, percibe por SENSACIONES, y no se deja llevar por ellas:
Y NO DEJARSE LLEVAR es distinto a no hacer algo por MEJORAR NUESTRO MUNDO como realidad más cercana... ¿POR DÓNDE QUIERES EMPEZAR? (Isaac Fdez. de la Villa)...

miércoles, 18 de mayo de 2011

EL FIN DE LA PEREZA... ¿ESTAMOS HARTOS YA?...

Pues poco que comentar sobre lo que parece estar acrisolándose a pasos agigantados, con manifestaciones donde al fin, nos unimos por aquello que no entiende de gustos y preferencias; LA INDIGNACIÓN, O EL SUFRIMIENTO, O EL DOLOR DE VER CON CONCIENCIA LO ABSURDO DE ESTA SOCIEDAD PREFABRICADA... y SÓLO ES EL PRINCIPIO...



Y curiosa la foto, entre muchas más que circulan por las noticias de internet, por el cartel del centro: "VOLVED A DORMIR, TODO ESTÁ BIEN...", que percibí como coán para quienes despertando, creyeron que ya no hay nada que hacer, para quedar dormidos de nuevo en la complacencia perezosa, de no hacer algo para mejorar el mundo, para sólo dedicarse a los deleites metafísicos, propios de la nueva capacidad de sentir, y sentirse, más libres de la programación que antes... Pero como siempre, que cada cual haga lo que sienta... o lo que pueda con lo que siente... ¿Y no es poco hacer, el VERNOS CON INDIGNACIÓN, CON SUFRIMIENTO PROPIO O POR COMPASIÓN HACIA OTROS?...
PERO LO QUE QUEDA MUY CLARO ES: QUE HAY QUE HACER ALGO... Teniendo en cuenta, que el no hacer, siendo sentido y sin pereza, es también una forma de hacer... Ya que el hacer, no sólo se trata de hacer algo hacia afuera, se puede crear y recrear nuestro mundo, haciendo dentro de nosotros mismos, transformándonos nosotros, lo cual inevitablemente transformará el exterior.
¿Qué estamos haciendo con lo que sentimos?...

¡¡ÁNIMO, COMANDANTES DE VUESTRAS VIDAS!!!... ADELAAAAANTE... NI UN PASO ATRÁS...
¡¡¡ DESPERTAD, TITANES, DESPERTAD!!!...

ADELANTE LA #spanishrevolution

Isaac Fernández de la Villa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario